MARTILES ESCOLAPIAS
ICONO DE LAS MARTILES ESCOLAPIAS
Las beatas mártires escolapias, en el Icono, nos entrega su mensaje en líneas y colores, plasmado por el Espíritu Santo, iconografía y protagonista por excelencia de todo icono.
Cristo Rey corona a las mártires.
En la parte superior del icono, en el centro, vemos la figura de Cristo Rey del Universo, dador de la corona de justicia con la que el Señor, justo juez, premia; corona merecida por la confesión valiente de esas testigos de Cristo que, por amor y fidelidad al Señor Jesús, prefirieron la muerte antes que negar su fe.
Cada una de las mártires lleva una corona de color rojo, igual que Cristo, sobre su cabeza, escrito sobre el oro de la gloria del Cielo, significa la llamada amorosa y personal a cada una de sus escogidas.
Dolores y Consuelo Aguiar-Mella Diaz.
En el centro del grupo, las dos mártires, hermanas Dolores y Consuelo, muy queridas e identificadas con sus profesoras escolapias, se adhirieron por amor a Cristo, al sacrificio de entregar sus vidas. En el icono se nos presentan en visión apocalíptica con túnica blanca, habito de gloria, merecido por el martirio.
Sus figuras, se asemejan a siluetas angélicas, en los textos de la Liturgia bizantina, son comparados a los ángeles.
Lleva, también, en la mano la Cruz del martirio.
La gloria del martirio…
El presente icono no se encuentra entre el número de los iconos hagiográficos, o modelo llamado “épico”. Por este mismo motivo, sobre el marco “pole”, no se relatan escenas relativas a sus vidas. Porque el mensaje del icono de las mártires escolapias es el descubrirnos y ofrecernos mediante colores e imágenes, la gloria del martirio.
Este icono se inspira en las más puras y fecundas fuentes de la liturgia bizantina y, también, en la tradición iconográfica. Puede ser contado entre los iconos llamados triunfadores del mal.
En este icono las mártires escolapias están representadas como triunfadoras de Satán. La antigua serpiente bíblica, según la tradición iconográfica se representa por el dragón, tal como aparece en la parte inferior izquierda del icono.
La Theotokos invencible
En la parte central del Icono, rodeadas por cuatro mártires a cada lado, la bandera, representando a la Madre de Dios, la Theotokos con su Hijo Jesús.
La bandera, acabada en forma de Cruz, aplasta al dragón, como simbolizando el triunfo de la toda Santa, y el de sus seguidores, apoyados en el poder de la siempre Virgen María.
Mártires, Educadoras, Escolapias…
Las Mártires Escolapias, fueron educadoras por vocación en el seguimiento de Cristo Maestro, en la tierra, y cada una en sus respectivos ministerios apostólicos, cuyas voces se oyeron vibrantes y dulces aulas de los colegios, impartiendo a las niñas una educación integral, humana, y Cristiana bajo el lema “Piedad y Letras”.
Trasunto de la Gloria imperecedera. 
Este Icono con su “pole” y todo su fondo en oro, quiere ser como un trasunto de gloria.
En la parte derecha inferior del icono aparecen un rio y unas flores. El rio, símbolo de la fecundidad, agua de la gracia que purifica, refresca, y santifica; el agua, símbolo de la fecundidad del sacrificio y floración pujante de la semilla del martirio representado en las flores, junto con las corrientes del rio.
A los 23 años, Paula estaba decidida a entrar a la Congregación de Hermanas. Ella sentía que Dios le pedía algo, aunque todavía no sabía que era. Lo que si sabía era que se sentía feliz entre los niños. 
